Historia

La historia comenzó a escribirse un treinta de noviembre de 1969. Ese día en horas de la tarde y en la sede de la Biblioteca Pública Bernardino Rivadavia, sito en calle Villegas 668, se desarrolló la Asamblea Extraordinaria y Constitutiva del entonces flamante Colegio de Martilleros y Corredores Públicos del Departamento Judicial de Trenque Lauquen.
En esa jornada y para ese efecto, estuvieron presentes el Presidente y Secretario del Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de la Provincia de Buenos Aires, Luis Lopardo y Ricardo Orlando Basso respectivamente.
De esa asamblea constitutiva surgió el primer Consejo Directivo el cual quedó integrado de la siguiente manera: Manuel Bernardo Feito, Presidente; Pedro Luis D’Elía, vicepresidente primero; Nicolás Antonio Pignanelli, vicepresidente segundo; Héctor Antonio Achaerandio, secretario general; Manuel Izaguirre, Secretario de Actas; Luis Quintín Odriozola, Tesorero; Dante Victorio Enrico, protesorero; Jorge Esteban Pablos, Juan Carlos Córdoba, Jorge Mario Lafón, Abel Estévez y Pedro Buscetti, fueron nominados como vocales titulares y como suplentes Oscar Octavio Gilardenghi, Oscar Carlos D’Amato, Cándido Manuel Bassi, Angel Julio Rosolén y Juan Carlos Echaire.
Por su parte el Tribunal de Disciplina quedó integrado por Jerónimo Antonio Gutiérrez, Matías Diehl, Luis Antonio Ripamonti, Anselmo Venancio Paso y Emilio Teófilo Rosset. Como suplentes fueron elegidos Pedro Silvestre Monferrand, Ricardo Francisco Abásolo, Miguel H. Paso, Adolfo Antonio Almiranll y Vicente Pedro Tucci. Por el Tribunal Arancelario estaban como miembros titulares José María Arrutti, Luis Edgardo Odriozola, Julio Galantermik Santiago Rouan, Andrés Eberwein. Y como suplentes lo hicieron Faustino Miranda, Oscar Angel Diaz, Alberto Enrique Martín Fausto Carlos Norrhy y Dante Gatón.
Nombre de colegas que quedaron vinculados a la historia de nuestra institución, no sólo por el hecho de ser pioneros, sino fundamentalmente por el empeño, dedicación y amor que le dedicaron al Colegio a través de su vida profesional. Fueron ellos los impulsores de lograr la sede propia, objetivo que se cumplió a poco andar gracias al esfuerzo infatigable de este grupo de personas que se comprometió y comprometió al resto de los colegas sobre la importancia de contar con un Colegio que brindara un marco institucional tanto a la profesión como a la sociedad como destinataria de los servicios prestados. El actual edificio fue adquirido con fondos que en buena medida fueron aportados por los propios colegiados con la plena convicción de estar sentando las bases que permitieran un constante desarrollo profesional en la extensa geografía de los trece distritos que integran el Departamento Judicial.
Y por esa senda transitamos estas cuatro décadas que sabe de logros importantes, de frustraciones que el tiempo y el tesón superaron, con alegrías compartidas y las tristezas que provocan las ausencias físicas que mantienen la presencia en la prédica del trabajo, la honestidad y la responsabilidad.
Cuarenta años en los que supimos de épocas de “vacas gordas” y de las otras flacas, de cosechas récord y de inundaciones, de pleno crecimiento y de recesión, de estabilidad e hiperinflación, pero siempre con el norte puesto en la jerarquización profesional, en nutrirnos de nuevos conocimientos acordes a los tiempos que permitan brindar el asesoramiento correcto. En ese camino estamos y en él seguiremos.

Presidencias

Martilleros: Los Orígenes

La expresión viene de quien “maneja el martillo” y se asociaba a las ventas de cosas en publico, donde los interesados pujaban, adjudicando el vendedor, mediante un “golpe de martillo” la compra al ultimo oferente, como ocurre hasta nuestros días. Quienes ejercian este oficio o profesión, se les llamó tambien “subastadores”, que proviene de la palabra subasta. En las primeras comunidades, anteriores a la era cristiana, los pueblos nómades convergian en un lugar, donde intercambian en trueque o vendían mercaderías y efectos. Los lugares de venta se señalaban con un asta clavada en el suelo con un trapo a modo de bandera que indicaba esa ubicación y debajo colocaban en exhibición lo que ponían a la venta. De allí la expresión “subasta” que se compone del vocablo “sub” (bajo) y “asta”, o sea “bajo el asta”. Se los distingue asimismo con la denominación “rematador”, el que remata, pone fin a una cosa. La expresión nace de los remates en sede judicial, que con la venta de los bienes embargados para pagar una deuda, se “pone fin” al pelito. Sin embargo, ha sido la denominación como “Martillero Público”, la que distingue a esta actividad, que desde su reglamentación en el Código de Comercio, hace ya 150 años, fue evolucionando hasta convertirse en una profesión a la que se accede con título universitario, a partir de a sanción de la ley 25.028.

Marco Legal

Las profesiones de Martillero Público y Corredor Inmobiliario estan reglamentadas por la ley nacional 20.266. En la Provincia de Buenos Aires, desde el año 1961, rige la colegiación obligatoria. Ambas profesiones deben estar inscriptas en un Colegio Público común, que gobierna sus matrículas y ejerce la potestad disciplinaria sancionando a quienes no cumple las normas del ejercicio profesional, fijadas actualmente en la ley 10.973. De esta manera, la comunidad a la que sirven estas profesiones se encuentran legalmente protegidas de actos que la perjudiquen realizados por los profesionales colegiados, ya los sea dolosos o por “mala praxis”. En cada Departamento Judicial, exite un colegio de ley, que actua con el aditametno de este (en nuestro caso Colegio de Martilleros y Corredores Públicos del Departamento Judicial de Mercedes) en toda su jurisdicción territorial. Estos colegios son gobernados por lo propios colegiados, elegidos en Asambleas mediante el voto secreto y obligatorio de los miembros de la colegiación. Las designaciones son “ad honorem” y revisten las obligaciones de “carga pública”, por ser los Colegios instituciones de derecho público por delegación del Estado.

Corredor Inmobiliario

El corretaje nace con el comercio mismo y fue ejercicio siempre como una intermediaciòn entre quien vende y quien compra. No vende publicacmente como el martillero sino que solamente acerca a las parte interesadas, las que concluyen entre si el negocio, por contrato privado, llamado “boleto de compra-venta”, percibiendo por su tarea un estipendio o “comisión” palabra qe deriva de “comisionista”, otra de las expresiones que definen, equivocadamente, esta actividad. Sus denominaciones legales han sido las de corredor de comercio, o corredor público. Sin embargo, el ejercicio excluyente en un mercado específico, como lo es el inmobiliario, adicionó naturalmente al corretaje de bienes raices esa definición que lo indiviualiza claramente, tomando sus oficinas la denominación “Inmobiliaria”. Actualmente, por imperio de la mencionada ley 25.028, el corretaje es una profesión universitaria.

Comisiones Directivas: Período 2018 - 2020

Comisiones Directivas: Período 2016 - 2018

Comisiones Directivas: Período 2014-2016

Comisiones Directivas: Período 2012-2014

Comisiones Directivas: período 2000-2008

Carrera universitaria

Autoridades

11 de Octubre, día del martillero

En todo el país se celebra el 11 de Octubre, el Día del Martillero y Corredor Público. Su designación ocurrio en el año 1945, en una Asamblea de la Federación Argentina de Entidades de Martilleros y Corredores Inmobiliarios realizada en Avellaneda. Se conmemora así todos los años, su fundación como tal, votada el 11 de Octubre de 1943 en la Capital Federal. Esta institución puede ser catalogada como el “tronco genitor” de los colegiados públicos, ya que con enorme esfuerzo bregó pro la sanción de las leyes que los hicieron posibles, sindo desde siempre nuestro mayor referente en el órden nacional.